viernes, 25 de marzo de 2011

PROYECTO OGM


OBSERVACION:

 Productos transgénicos.

IDENTIFICACION DEL PROBLEMA:

¿Cómo afectan los transgénicos al medio ambiente?

HIPOTESIS:

El uso excesivo de transgénicos hace cada día más notable la pérdida del origen de la naturaleza.


IMPACTO VIABILIDAD JURIDICA
La introducción  de los OGM en la agricultura crea el monopolio de unas pocas multinacionales básicamente de EE.UU. sobre la producción de alimentos, lo que pone en peligro la soberanía de los pueblos  y de los países.
El desarrollo de la biotecnología, con su creciente capacidad para manipular genéticamente organismos, ha planteado nuevas posibilidades de desarrollo para la sociedad contemporánea. Al mismo tiempo, sin embargo ha generado nuevos tipos de riesgos y peligros que eran impensables e inimaginables hace apenas unos pocos decenios. Peligros ante los cuales por cierto, casi no tenemos formas de defensa.
Un organismo manipulado por la ingeniería genética moderna, puede ser capaz de producir proteínas distintas al organismo natural de donde proviene. Por lo tanto, su posible impacto en el medio ambiente y en la salud humana, puede tener consecuencias inesperadas, que no necesariamente resultan evidentes o detectables en los laboratorios o en las condiciones controladas donde confinados, han estado siendo estudiados.
La liberación de este tipo de organismos en el medio ambiente, no cuenta con antecedentes que permitan anteponer experiencia alguna respecto a cómo debe la sociedad comportarse ante ellos. Los resultados del impacto que pudiera producirse, en el mejor de los casos han de suponerse como inciertos y según algunos como francamente peligrosos. 
Diversos estudios obligan a pensar que el uso de los organismos modificados genéticamente implica un grave riesgo para la biodiversidad y para la salud humana; por lo tanto, se ha hecho necesario crear el instrumento jurídico dedicado a establecer las medidas de prevención y control de los posibles impactos negativos en el ambiente y la salud humana, bajo criterios científicos.
Así, la Ley de Bioseguridad de Organismos Genéticamente Modificados ha generado, tal como se establece en el Preámbulo del Decreto que la expide, “...una legislación que contempla un enfoque precautorio para llevar a cabo las evaluaciones y la gestión del riesgo de las liberaciones al ambiente de organismos modificados genéticamente, productos y subproductos que los contengan, las cuales deberán realizarse de manera multidisciplinaria, coordinada y transectorial, con base en criterios científicos y datos experimentales disponibles, caso por caso y en congruencia con una política nacional de bioseguridad que dé sustento y establezca las bases para prevenir los posibles riesgos al ambiente y a la salud humana.”
En el trabajo que se comenta, partiendo de la postura fundamental de considerar a la bioseguridad como una expresión de la bioética, se hace un amplio análisis de la correspondencia que debiera existir entre la Ley de Bioseguridad de Organismos Genéticamente Modificados en cuanto a su relación con las necesidades de la sociedad mexicana respecto a la bioseguridad, materia del ordenamiento jurídico que se menciona. Como consecuencia de tal análisis se debate la relación existente entre la soberanía alimentaria frente al desarrollo e introducción de los alimentos transgénicos en el campo y en la sociedad mexicanos.
De manera adicional se presenta en la parte final del trabajo una serie de Conclusiones Generales que quieren apuntar a ser consideradas al mismo tiempo, como un entramado de propuestas respecto a la adecuación de los alimentos transgénicos. Se trata de una propuesta limitada e incompleta, más entusiasta que adecuada, nacida en todo caso de las cavilaciones de un preocupado y casi alarmado estudioso del Derecho, disciplina que sin lugar a dudas, seguramente será decisiva para definir el futuro de nuestro país respecto a la suerte que nos espera en relación a los alimentos transgénicos.

En muchos lugares de América el agronegocio se extiende expulsando a la población campesina. Esta expulsión se efectúa a veces usando la violencia o fumigando las comunidades, como ha ocurrido en Paraguay. En este caso el problema es la ausencia de estado de derecho, y la falta de catastro lo suele agravar porque los campesinos no pueden demostrar que la tierra que cultivan es suya. Pero a veces el problema no es el abuso ilegal de unos grandes propietarios sobre otros pequeños, sino un problema de tecnología, en cuyo caso tendemos a  culpar a la soja transgénica y las multinacionales por la expoliación de tierras. 

IMPACTO GEOAMBIENTAL
A corto, medio y largo plazo, incremento de la contaminación química (ej. con las plantas tolerantes a un herbicida, el agricultor puede usar grandes cantidades de ese herbicida).
Contaminación del suelo por acumulación de la toxina Bt.
Posibilidad de cruzamientos exteriores que podrían dar lugar, por ejemplo, al desarrollo de malas hierbas más agresivas o de parientes silvestres con mayor resistencia a las enfermedades o provocar tensiones ambientales, trastornando el equilibrio del ecosistema.
Pueden crearse nuevos virus y aumentar la resistencia de los virus naturales
Modificar los efectos de los pesticidas que pueden atacar a organismos contra los que no estaban diseñados
Contaminación genética por polinización cruzada: si los cultivos convencionales y los transgénicos no están separados por grandes distancias, la modificación genética acaba encontrándose en las plantas del campo convencional que se polinizan mediante el viento, los insectos, las aves, etc.
Desaparición de biodiversidad:
-          por el aumento del uso de productos químicos (efectos sobre flora y fauna);
-          por las toxinas fabricadas por las plantas (matan a insectos beneficiosos o pájaros);
-          por la contaminación genética: Se puede transmitir la modificación genética a especies silvestres emparentadas con la planta transgénica. La contaminación genética tiene la capacidad de reproducirse y expandirse (son seres vivos). Una vez en el medio ambiente, la contaminación no se puede "limpiar" nunca. Los efectos de los transgenes en las plantas silvestres son absolutamente imprevisibles.
Impactos ambientales positivos o negativos durante el proceso productivo.
Modificaciones de los atributos nutritivos del producto final y sus riesgos para la salud de los consumidores.
Actualmente existe una tendencia en la Legislación Europea a regular la comercialización de los OGM, con una creciente intención de exigir su etiquetado para diferenciarlos de los cultivos orgánicos y de los cultivos convencionales, suministrando información detallada a los consumidores. Esto significaría un costo extra que hasta el momento no queda bien definido como habría de ser soportado entre los sujetos que participan desde la etapa su producción, distribución y la de exportación e importación.
LA  EXPANSIÓN  DE  LOS  CULTIVOS  TRANSGÉNICOS AMENAZA  LA  BIODIVERSIDAD  POR  LA  SIMPLIFICACIÓN  DE LOS  SISTEMAS  DE  CULTIVO,  CREANDO  ASÍ  LAS CONDICIONES  PARA LA  UNIFORMIDAD  GENÉTICA EN  EL     PAISAJE RURAL
La ingeniería genética es una aplicación de la biotecnología que involucra la manipulación de ADN y el traslado de genes entre especies para incentivar la manifestación de rasgos genéticos deseados (OTA 1992). Aunque hay muchas aplicaciones de la ingeniería genética en la agricultura, el enfoque actual de la biotecnología está en el desarrollo de cultivos tolerantes a herbicidas, así como en cultivos resistentes a plagas y enfermedades. Corporaciones transnacionales (CTNs) como Monsanto, DuPont, Norvartis, etc., quienes son los principales proponentes de la biotecnología, ven los cultivos transgénicos como una manera de reducir la dependencia de insumos, tales como pesticidas y fertilizantes. Lo irónico es que la biorrevolución está siendo adelantada por los mismos intereses que promovieron la primera ola de agricultura basada en agroquímicos, pero ahora, equipando cada cultivo con nuevos "genes insecticidas", prometen al mundo pesticidas más seguros, reducen la agricultura químicamente intensiva y a la vez la hacen más sustentable.
Siempre que los cultivos transgénicos sigan estrechamente el paradigma de los pesticidas, los productos biotecnológicos reforzarán el espiral de los pesticidas en los agroecosistemas, legitimando así las preocupaciones que tantos científicos han expresado con respecto a los posibles riesgos medioambientales de organismos genéticamente modificados. De acuerdo a varios autores, los riesgos ecológicos más serios que presenta el uso comercial de cultivos transgénicos son (Rissler y Mellon 1996):
  • La expansión de los cultivos transgénicos amenaza la diversidad genética por la simplificación de los sistemas de cultivos y la promoción de la erosión genética.
  • La potencial transferencia de genes de cultivos resistentes a herbicidas (CRHs) a variedades silvestres o parientes semidomesticados pueden crear supermalezas.
  • CRHs voluntarios se transformarían subsecuentemente en malezas.
  • El traslado horizontal vectormediado de genes y la recombinación para crear nuevas razas patogénicas de bacteria.
  • Recombinación de vectores que generan variedades del virus más nocivas, sobre todo en plantas transgénicas diseñadas para resistencia viral en base a genes virales.
  • Las plagas de insectos desarrollarán rápidamente resistencia a los cultivos que contienen la toxina de Bt.
  • El uso masivo de la toxina de Bt en cultivos puede desencadenar interacciones potencialmente negativas que afecten procesos ecológicos y a organismos benéficos.
Los impactos potenciales de la biotecnología agrícola se evalúan aquí dentro del contexto de metas agroecológicas que apunten hacia una agricultura socialmente más justa, económicamente viable y ecológicamente apropiada (Altieri 1996). Tal evaluación es oportuna dado que en el ámbito mundial han aprobado más de 1500 pruebas de campo de cultivos transgénicos (el sector privado ha solicitado 87% de todas las pruebas de campo desde 1987), a pesar del hecho que en la mayoría de los países no existen regulaciones estrictas de bioseguridad para tratar con los problemas medioambientales que pueden desarrollarse cuando plantas diseñadas por ingeniería genética son liberadas en el ambiente (Hruska y Lara Pavón 1997).
PROBLEMAS  AMBIENTALES  DE  LOS  CULTIVOS RESISTENTES  A  LOS  HERBICIDAS
Según los defensores de CRHs, esta tecnología representa una innovación que permite a los agricultores simplificar sus requisitos de manejo de malezas, reduciendo el uso de herbicidas a situaciones de post-emergencia usando un solo herbicida de amplio-espectro que se descomponga relativamente rápido en el suelo. Herbicidas candidatos con tales características incluyen: Glyphosate, Bromoxynil, Sulfonylurea, Imidazolinones, entre otros. Sin embargo, en realidad el uso de cultivos resistentes a los herbicidas probablemente aumentará el uso de herbicidas así como los costos de producción. También es probable que cause serios problemas medioambientales.
RESISTENCIA  A  HERBICIDAS
Está bien documentado que cuando un solo herbicida es usado repetidamente sobre un cultivo, las oportunidades de que se desarrolle resistencia al herbicida en la población de malezas se incrementa. Las sulfonylureas y los imidazolinones son particularmente propensos a la evolución rápida de malezas resistentes y se conocen hasta catorce especies de malezas que presentan resistencia a los herbicidas del sulfonylurea. Cassia obtusifolia una maleza agresiva en la soja y en el maíz en el sudeste de los Estados Unidos ha exhibido resistencia a los herbicidas del imidazolinone (Goldburg, 1992).
El problema es que dada la presión de la industria para aumentar las ventas de herbicidas, la superficie tratada con los de amplio espectro se extenderá, exacerbando el problema de resistencia. Por ejemplo, se ha proyectado que la superficie tratada con Glyphosate aumentará a casi 150 millones de acres. Aunque el Glyphosate es considerado menos propenso para desarrollar resistencia, el aumento en el uso del herbicida producirá resistencia en malezas, aunque más lentamente, como se ha documentado en poblaciones de ryegrass anual, quackgrass, birdsfoot trefoil y especies de Cirsium.
 
 IMPACTOS  ECOLÓGICOS  DE  LOS  HERBICIDAS
Las compañías afirman que el Bromoxynil y el Glyphosate, cuando son propiamente aplicados se degradan rápidamente en el suelo, no se acumulan en las aguas subterráneas, no tienen efectos en organismos y no dejan residuos en los alimentos. Hay, sin embargo, evidencia de que el Bromoxynil causa defectos de nacimiento en animales de laboratorio, es tóxico para los peces y puede causar cáncer en humanos. Debido a que el Bromoxynil es absorbido por vía dermatológica, y porque causa defectos de nacimiento en roedores es probable que presente riesgos a los agricultores y obreros del campo. Similarmente se ha reportado que el Glyphosate puede ser tóxico para algunas especies invertebradas que habitan en el suelo, incluyendo a predadores benéficos como arañas y carábidos y especies detritívoras como lombrices de tierra y también para los organismos acuáticos, incluso los peces. En la medida que estudios verifican la acumulación de residuos de este herbicida en las frutas y tubérculos, al sufrir poca degradación metabólica en las plantas, emergen también preguntas sobre la seguridad de los alimentos con trazas de estos herbicidas.
CREACIÓN  DE  "SUPER MALEZAS"
Aunque existe la preocupación que los cultivos transgénicos se puedan convertir a su vez en malezas, el mayor riesgo ecológico es que las liberaciones a gran escala de cultivos transgénicos pueden provocar el flujo de transgenes de los cultivos a otras plantas silvestres que entonces podrían transformarse en malezas (Darmency, 1994). El proceso biológico que preocupa aquí es la introgresión, es decir, la hibridación entre especies de diferentes plantas. La evidencia indica que tales intercambios genéticos entre malezas silvestres y cultivos ya ocurren. La incidencia de shattercane (Sorghum bicolor), una maleza emparentada con el sorgo y el flujo genético entre el maíz y el teocintle demuestran el potencial de los cultivos emparentados a volverse serias malezas. Esto es preocupante dado que varias plantas en los Estados Unidos son cultivadas en proximidad con sus parientes sexualmente compatibles. Hay también cultivos que crecen en las proximidades de malezas silvestres que no son parientes íntimos pero pueden tener algún grado de compatibilidad cruzada tales como los cruces de Raphanus raphanistrum x R. sativus (rábano) y de Sorghum halepense x maíz sorgo (Radosevich y otros 1996).
REDUCCIÓN  DE  LA  COMPLEJIDAD  DEL   AGROECOSISTEMA
La remoción total de malezas vía el uso de herbicidas de amplio espectro puede provocar impactos ecológicos indeseables, dado que se ha documentando que un nivel aceptable de diversidad de malezas en los alrededores o dentro de los campos de cultivo puede jugar un papel ecológico importante, tal como la estimulación del control biológico de plagas o la mejora de la cobertura protectora contra la erosión del suelo, etcétera (Altieri, 1994).
Lo más probable es que los CRHs refuercen el monocultivo al inhibir las rotaciones y los policultivos ya que la diversificación es imposible si se usan cultivos susceptibles a los herbicidas combinados con los CRHs. Tales agroecosistemas empobrecidos en su diversidad vegetal proveen las condiciones óptimas para el crecimiento libre de malezas, insectos y enfermedades dado que muchos nichos ecológicos no están siendo ocupados por otros organismos. Es más, los CRHs a través del incremento de la efectividad del herbicida podrían reducir aún más la diversidad vegetal, provocando cambios en la composición y abundancia de la comunidad de malezas y favoreciendo especies competitivas que se adaptan a un amplio espectro de tratamientos de post emergencia (Radosevich y otros 1996)
 
 RIESGOS  AMBIENTALES  DE  LOS  CULTIVOS  RESISTENTES  A  INSECTOS
RESISTENCIA                                                     
Según la industria, los cultivos transgénicos insertados con genes de Bt prometen reemplazar el uso de insecticidas sintéticos en el control de plagas de insectos. Puesto que la mayoría de los cultivos tienen una diversidad de plagas de insectos, los insecticidas todavía tendrán que ser aplicados para controlar plagas diferentes a los Lepidóptera que son los susceptibles a la endotoxina expresada por el cultivo (Gould, 1994).
Por otro lado, se tiene conocimiento de que varias especies de Lepidoptera han desarrollado resistencias a la toxina de Bt en pruebas de campo y de laboratorio, sugiriendo que los mayores problemas de resistencia se desarrollan en cultivos transgénicos donde la expresión continua de la toxina crea una presión fuerte de selección (Tabashnik, 1994).
Dado que se ha aislado una diversidad de genes de la toxina Bt, los biotecnólogos argumentan que si se desarrolla resistencia pueden usarse formas alternativas de la toxina Bt (Kennedy y Whalon, 1995). Sin embargo, dado que es probable que los insectos desarrollen resistencia múltiple o resistencia cruzada, tal estrategia también está condenada al fracaso (Alstad y Andow, 1995).
Basándose en experiencias pasadas con pesticidas, otros han propuesto planes de manejo de la resistencia con cultivos transgénicos, tales como el uso de mezclas de semilla y refugios (Tabashnik, 1994). Además de requerir la difícil tarea de una coordinación regional entre agricultores, los refugios han presentado un éxito pobre con los pesticidas químicos, debido al hecho que las poblaciones de insectos no están restringidas a un agroecosistema cerrado, y los insectos que entran están expuestos a cada vez más bajas dosis de la toxina en la medida que el pesticida se degrada (Leibee y Capinera, 1995).
EL  COMPORTAMIENTO  DE  LOS  CULTIVOS TRANSGÉNICOS  LIBERADOS
Hasta principios de 1997, trece cultivos genéticamente modificados habían sido desregulados por el USDA, apareciendo por primera vez en el mercado o en los campos. En 1996 más de 20% de la superficie cultivada de soja en los Estados Unidos fue sembrada y con soja tolerante al Round-up y cerca de 400 mil acres se sembraron con maíz de Bt maximizado. Esta superficie se extendió considerablemente en 1997 (algodón transgénico: 3.5. millones de acres, maíz transgénico: 8.1 millones de acres) debido a acuerdos de mercadeo y distribución entre corporaciones y mercaderes (por ejemplo Ciba Seeds con Growmark y Mycogen Plant Sciences con Cargill).
¿Dada la velocidad con que los productos se mueven del laboratorio a la producción del campo, están los cultivos transgénicos respondiendo a las expectativas de la industria de la biotecnología?. Según evidencia presentada por la Union of Concerned Scientists (1996), hay ya signos de que el uso a escala comercial de algunos cultivos transgénicos presenta riesgos ecológicos serios y no responde a las promesas de la industria.
El aparente comportamiento resistente del bellotero en el algodón que se manifiesta en la capacidad del herbívoro de encontrar áreas del tejido de la planta con bajas concentraciones de Bt, nos lleva a preguntarnos hasta qué punto las estrategias de manejo de resistencia que se han adoptado son las adecuadas, pero también nos induce a cuestionar la forma en que los biotecnólogos subestiman la capacidad de los insectos para sobreponerse en formas inesperadas a la resistencia genética.
De la misma forma, rendimientos pobres en las cosechas de algodón resistente al herbicida a causa del efecto fitotóxico del Round-up en cuatro a cinco mil acres en el Delta del Mississippi (New York Times, 1997) señalan a la actuación errática de los CRHs cuando están sujetos a condiciones agroclimáticas variantes. Monsanto argumenta que esto es un caso muy pequeño y localizado que es usado por ambientalistas para oscurecer los beneficios que la tecnología llevó a un área total de 800 mil acres. Sin embargo, desde un punto de vista agroecológico este incidente es bastante significativo y merece una extensa evaluación. Es incorrecto asumir que una tecnología homogeneizante tendrá un buen comportamiento en un rango de condiciones heterogéneas.  

IMPACTO  EN  LA  SALUD

HUMANA
Dado la falta de estudios extensivos y regulares sobre los posibles efectos negativos para la salud humana, se podría caer en una subestimación de las consecuencias que los OGM podrían causar sobre el hombre y otros animales, especialmente cuando los mismos (como la soja, el maíz, etc) entran en la cadena alimenticia. Hasta el momento sería el único riesgo cierto y probado es el de posibles efectos alergénicos.
Algunos de los potenciales riesgos podrían ser:
-          Incremento de la contaminación en los alimentos por un mayor uso de productos químicos.
-          Aparición de nuevos tóxicos en los alimentos (por ej. debidos a los cultivos Bt).
-          Aparición de nuevas alergias por la introducción de nuevas proteínas en los alimentos. Inactivación de sustancias nutritivas valiosas en los alimentos.
-          Resistencia de las bacterias patógenas para el hombre a los antibióticos y reducción de la eficacia de estos medicamentos para combatir las enfermedades humanas. Herbicidas como el Bromoxynil  puede llegar a causar cáncer en humanos. Debido a que este producto es absorbido por vía dermatológica, es probable que presente riesgos a los agricultores.
TECNOLOGÍA  TRANSGÉNICA
INNOVACION Y DESARROLLO DE LOS TRANSGENICOS
La manipulación genética de los alimentos nació como respuesta a las necesidades sociales de muchos países que ven sufrir a su población por la desnutrición.
La manipulación genética de alimentos comenzó hace muchos años cuando el hombre modificó las semillas de algunas frutas y vegetales. Este proceso era demorado ya que dependía de una evolución natural. En la actualidad, la ingeniería genética permite llevar a cabo este proceso de forma rápida y controlada. La ingeniería genética comenzó modificando compuestos y propiedades de frutas, verduras y animales para la producción de sustancias farmacéuticas, pero su gran costo hizo que la investigación fuera limitada. Más adelante, se dio una aplicación industrial en productos químicos para la elaboración de algunos productos. Por último, se extendió a los vegetales, las frutas y los animales, para mejorar sus propiedades.
IMPACTO PSICOSOCIAL

Debe tenerse en cuenta, además de los riesgos para la salud, y de los impactos medioambientales,   el impacto  que los transgénicos implican  a nivel social,; que si bien desde algunos puntos de vista pueden generar beneficios, es inevitable analizar las desventajas.
Las grandes empresas que desarrollan y comercializan los OGM están patentando el material genético de los seres vivos, que más bien debería considerarse como patrimonio de la humanidad. Están creando un monopolio sobre la agricultura y la alimentación mundial, en un modelo de sociedad donde unos pocos realizan beneficios a costa del interés de la mayoría y donde se exacerban las diferencias entre pobres y ricos.
Tener en cuenta que si bien el uso de la ingeniería genética en la agricultura puede aumentar la producción, también puede a la vez reducir el desempleo, por ejemplo el hecho del encarecimiento de las semillas y la necesidad de comprar insumos importados  serían  un factor más para la desaparición  de los agricultores familiares.

INGLÉS
The biotechnology has been used for thousand years for modified the foods for example the tomatoes, these have been modified for genetic engineering caughting a cell of conventional product for make more resistant but with more flavor.
With the applications and evolution of the biotechnology has been discovered the laws the Mendelian heredity. The first drug produced by genetic engineering ocurred in 1988 it was a mouse .
One of the major benefits of GM foods are: they can resist during seven days it seem strange, but is true.
All this process seem easy or simple but is not because take time to find the cell corresponding to each character, in addition the possibility of occurrence of a rejecution, but it is unusual.

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